Escritores

¿Cuánto tiempo ha de transcurrir para que un agradable momento fermente en un dulce vino?

Buscando unos folletos en mi estudio, encontré las impresiones que poseo de los primeros Viajes del Escritor que fueron organizados por Lectores Chapines, me dio gusto repasar algunas historias y volver a leer las anotaciones que hice y los párrafos subrayados.

Hace algunas semanas se dio la premiación del concurso BAM Letras que dio como ganador a Diego Stuardo Ugarte Chacón con su novela “Yo, artista”, de la que espero llegar a tener noticias y mejor si son buenas. Navegando en la página de Facebook de F&G Editores se encuentran fotos de tal evento y en una de ellas hay un comentario que dice: “Existe solo un tipo de escritores: los publicados”.

Aunque celebro que se desarrollen actividades de ésta naturaleza, jamás podría estar de acuerdo con tal afirmación. Qué alguien sea escritor no obedece al criterio de una editorial. Casos abundan de exitosos textos que fueron despreciados por casas editoriales para que luego se arrepintieran del negocio que dejaron de hacer.

Quiero compartir sólo algunas de las frases que enriquecen los Viajes del Escritor que comenté, tengo en mi poder:

Estaba presenciando una vida, pero esa vida no era mía.
–Encajar

La tristeza era la forma y la felicidad, el contenido.
–No pasó nada

Hola mi cielo –la oigo decir. Paso de un estado sólido a liquido al oírla.
–La hora

Llevo largo rato tratando de encontrar el dato histórico de mi vida que quiero cambiar y no lo encuentro.
–Jugando a ser Dios

Fiel a su costumbre observó maravillado las vueltas de la taza con agua dentro del horno microondas reflexionando con detenimiento acerca de la grandeza de la mente humana y sus maravillosos logros.
–Tradiciones

Nadie le dijo a qué sabía una gota de lluvia, ni las fresas recién cortadas, ni el último trago de una copa de vino.
–Preguntas

Regalaré regalos que no se compran sino que se sienten, adornaré mi casa con materiales reciclados, sí, de esos que se reciclan una y otra vez, como la gratitud.
–Una nueva tradición para navidad

Me podía hasta sentir cómodo en medio de esa realidad obligada.
–La promesa de una tradición

Te bautizaría mil veces en el mar de mis palabras.
–Charla nocturna

Dicen, cuenta, lo platican; a mí sólo me consta lo que he escuchado.
–Una leyenda

Cuenta la leyenda,
…pétalo de rosa,
que dos príncipes enemigos,
…botones de rosa,
por amor se rindieron,
…destino de gloria,
y juraron amor eterno,
…promesa peligrosa.
–Un cuento del firmamento

Autor se le suele llamar a quien escribe y cuyo trabajo ha sido publicado. Es más acertado, porque escritor es quien escribe y me suele ser una constante el preguntarme cuántas buenas letras se han de perder por mera circunstancia.

Saludos