La gran historia de los libros para pequeños lectores
Al inicio de este año, mientras trabajábamos en la planificación de reuniones teníamos claro que dedicaríamos una reunión a la Feria Internacional del Libro Infantil y Juvenil (Ludoferia), a celebrarse por primera vez, en este mes de mayo.
Lo que aún no sabíamos entonces, era todo lo que sucedería en los primeros meses y que daría forma a la reunión de mayo. Desde la participación de Lectores que cada reunión se incrementa, el acercamiento al Fondo de Cultura Económica de Guatemala (FCE) y a una necesidad muy fuerte de cambiar la forma de hacer las reuniones. Cuatro cosas eran claras:
- Que fuera en honor a la Ludoferia. Como lectores, nos emociona mucho que exista un nuevo espacio para nosotros, para compartir lecturas, libros y locuras, y creemos que es importante darle la bienvenida como se merecen, y ofrecer todo el apoyo y respaldo para que crezca.
- Que la reunión fuera interactiva, en donde los lectores no llegaran solo a sentarse a escuchar, sino a participar y crear algo a partir de la reunión. ¿La meta? Que los lectores debíamos salir pensando diferente a cómo llegamos.
- Que fuera en un nuevo lugar. Sí, retomamos el espíritu nómada que caracterizó por muchos años a Lectores Chapines y este año estamos cambiando de lugares, después de un par de años siendo muy consentidos por Café Arte (¡Gracias!).
- Que hubieran personas extraordinarias para aprender de ellas. Tuvimos a cuatro lectoras muy creativas que nos compartieron su experiencia sobre crear libros.
La reunión dio inició con una amable bienvenida de Cesar Medina, Gerente del FCE en Guatemala, que luego me cedió la palabra y allí comenzó el primer reto: mantener la atención de los asistentes en el lugar más grande en el que hemos estado los Lectores Chapines.
Presentar la literatura infantil y juvenil es fácil, todos la conocemos y amamos, pero es importante saber que somos parte de su existencia. Como lectores adultos somos quienes debemos darle vida: de leerle historias a los niños, de enseñar las lecciones que vienen con ellas y también de aprender a crear nuevas historias para contar.
Para mostrar el valor de crear nuevas historias para jóvenes es necesario saber cómo se construye, y para ello invitamos a expertas en el tema a que nos contarán su experiencia y su proceso creativo: Stephanie Burckhard (Escritora), Brenda Monzón (Escritora y Directora de la Ludoferia), Adriana Polanco (Ilustradora) y Analú Castejón (Escritora).
Cada una de ellas nos demostró que crear historias es un proceso difícil y caótico, pero también muy divertido y satisfactorio. «Lo más difícil es dejar de tomarnos en serio» —dijo Adriana. Mientras que Analú nos recordaba que para perder el miedo a la hoja en blanco hay que comenzar con algo, lo que sea, pero comenzar. Stephanie y Brenda coincidieron en que no hay una forma de comenzar, se puede comenzar de muchas formas, desde la ilustración o la narración oral, y con diferentes motivaciones, como publicar un libro propio o dejarles una lección a nuestros hijos.
Al terminar la primera parte de la reunión, de presentación de las invitadas especiales, pasamos a las mesas para poder experimentar personalmente el proceso de crear una historia. Y repito, no es fácil, la timidez se hizo presente varias veces entre los lectores que no nos atrevíamos a rayar las hojas en blanco, a contar una historia o si quiera proponer una, sin embargo, fue cuestión de tiempo en que uno a uno comenzará a hablar, a dibujar, a preguntar, hasta que todos logramos envolvernos en ese espíritu creativo y liberar nuestras ideas, que pronto se transformaron en dibujos divertidos, historias extrañas y, no podían faltar, gatos.
Nuestra reunión de mayo fue diferente, retadora, divertida y creativa, justo como deben ser las historias que le contemos a las nuevas generaciones.
La reunión en fotos
Libros mencionados y presentes en la reunión
- Quisicosas de Pilar Mateos
- La pecera nueva de Anselmo de Stephanie Burckhard.
- Palabras mágicas de Analú Castejón
- Los cuentos de Langú de Brenda Monzón
- El libro salvaje de Juan Villoro
- El autobús de Rosa Park
Detrás de la reunión
Detrás de todas las reuniones de Lectores Chapines siempre hay personas apoyando y haciendo que la reunión no solo sea posible sino que además supere las expectativas. Así que nos parece justo reconocer su esfuerzo y agradecerles por hacer posibles estos espacios para Lectores Chapines.
En la planificación y organización del evento estuvo Vannia ([tuitero]@vannia_or[/tuitero]) e Iván ([tuitero]dic7[/tuitero], su servidor). Como fotógrafo oficial se encuentra Alex ([tuitero]@alexxx007[/tuitero]). Brenda Monzón([tuitero]@BrendaMonzonGT[/tuitero]) quien nos apoyó con información, recomendaciones y la difusión del evento. Gabriela Velásquez y Cesar Medina quienes hicieron posible que la reunión se realizará en el Auditorium FCE Guatemala([tuitero]@fceguatemala[/tuitero]). Y por supuesto, todos los lectores que apoyaron compartiendo el evento en sus redes sociales.
¡Gracias FCE Guatemala!
De parte de todos los Lectores Chapines agradecemos al Fondo de la Cultura Económica en Guatemala por brindarnos el espacio para esta reunión y por todas las atenciones brindadas.
¡Únete!
Si quieres apoyar, envía un correo a reuniones@lectoreschapines.com contándonos cómo te gustaría ayudar o qué ideas tienes para las reuniones. Si solo quieres saludar o pedir recomendaciones de libros escríbenos a hola@lectoreschapines.com